Freud y el diablo

El diablo es un personaje extraño y terrible que desde siempre obsesiona la imaginación humana. Bajo formas diferentes, sus características principales -la voluntad de hacer el mal y el poder desmedido- permanecen inmutables desde la Edad Media hasta nuestros días. Las pesadillas, los recuerdos de i...

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Detalles Bibliográficos
Otros Autores: Urtubey, Luisa de autor (autor), Laplanche, Jean director de la publicacón (director de la publicacón), Janés, Clara traductor (traductor)
Formato: Libro
Idioma:Castellano
Publicado: Torrejoón de Ardos, Madrid : Akal Depósito legal 1986.
Colección:Voces nuevas en psicoanálisis ; 2.
Materias:
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Descripción
Sumario:El diablo es un personaje extraño y terrible que desde siempre obsesiona la imaginación humana. Bajo formas diferentes, sus características principales -la voluntad de hacer el mal y el poder desmedido- permanecen inmutables desde la Edad Media hasta nuestros días. Las pesadillas, los recuerdos de infancia, los delirios, las supersticiones, la literatura, las películas, las expresiones de la lengua nos lo demuestran. Aunque la imagen del diablo aparece regularmente en un momente u otro en casi todas las curas, el psicoanálisis postfreudiano se ha dedicado al estudio de otros personajes míticos, principalmente los de origen griego, y ha abandonado al diablo. Freud se interesa apasionadamente por él. el diablo ocupa un lugar importante en su pensamiento y en sus fantasmas, como elemento central del mundo irracional y tenebroso que le fascina y que ha sido subestimado por sus exégetas y biógrafos en favor del mundo científico. De manera no sistemática, a lo largo de su obra y su correspondencia, Freud elaboroó un psicoanálisis aplicado del diablo. Punto por, Luisa de Urtubey lo ha reconstruido. Ha descubierto que se estructura en torno a dos temas interpretativos coexistentes y de igual importancia. Según el primero, el diablo es una representación, en primer lugar, del inconsciente, después de las pulsiones libidinales reprimidas y finalmente de la pulsión de muerte; según el segundo, el diablo es el representante del padre malo, por sedutor. Analizando más profundamente estos dos temas, Luisa de Urtubey sugiere que el diablo "pulsional" representa para Freud en cada momento de su pensamiento, lo que es más inconciliable con el yo y lo menos mediatizado por el proceso secundario. Tras el diablo mál padre seductor, se ocultan la pareja combinada angustiante y el mal objeto excitante interiorizado. Frente a ese diablo padre, se construyen tipos de compromiso, que expresan tres grado de relación: seducción, posesión y pacto. Freud aparece, a veces, seducido por el diablo, acercando la creencia en el análisis a la creencia en el Maligno y adjudicándse el papel de bruja. En otros momentos, rechaza todo nexo con lo diabólico y la posesión. Así sucede en "Una neurosis demoníaca en el siglo diecisiete" texto largamente estudiado aquí y que Luisa de Urtubey considera a la vez, como el estado clínico menos logrado que Freud haya escrito y como la creación más importante que Freud nos haya dejado sobre el diablo como representante del padre.
Descripción Física:196 páginas
Bibliografía:Bibliogra´fia: p. 187-192
ISBN:9788476000878