La imagen de un Dios violento

La violencia humana no nos causa perplejidad, pues es un hecho reificado a lo largo de la historia que el ser humano es violento. Pero sí es fuente de preocupación y perplejidad que la violencia se predique de Dios, que se pueda hablar de un Dios violento, esto es un Dios guerrero, airado, celoso, v...

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Detalles Bibliográficos
Autor principal: Barriocanal Gómez, José Luis (-)
Formato: Libro
Idioma:Castellano
Publicado: Burgos Monte Carmelo 2010
Colección:Espíritu - Norte;
Materias:
Ver en Biblioteca de Pastoral Madrid:https://kohasociados.upsa.es/cgi-bin/koha/opac-detail.pl?biblionumber=47800
Descripción
Sumario:La violencia humana no nos causa perplejidad, pues es un hecho reificado a lo largo de la historia que el ser humano es violento. Pero sí es fuente de preocupación y perplejidad que la violencia se predique de Dios, que se pueda hablar de un Dios violento, esto es un Dios guerrero, airado, celoso, vengativo, punitivo. Así se nos presenta el Dios del Antiguo Testamento . Pero por otro lado, aparece también como un Dios de paz, misericordioso, que rechaza el camino de la violencia como medio para implantar la justicia y la paz. Este doble rostro de Dios constituye la gran ambigüedad de la Escritura.
Descripción Física:334 páginas. 21 cm
Bibliografía:Incluye referencias bibliográficas (pág. 317-329)