Sumario: | Esta obra muestra unas meditaciones pastorales para este momento de la vida de la Iglesia. Reflexiones que inciden en este aspecto imprescindible y prioritario: no habrá evangelización posible si no hay evangelizadores a la altura de lo que demanda hoy la historia. Estos pensamientos son producto del encuentro con el beato Carlos de Foucauld. Con humildad -dice el autor-, con este hombre del desierto, diferente y insólito como pocos cristianos, se pueden emprender caminos nuevos de evangelización y de espiritualidad en este siglo xxi, llamado a ser místico o a no ser. Escuchemos, pues, al eremita del desierto y sus hermosas perlas con las que iniciar lo que los monjes llaman la «obra de Dios». Tarea difícil, pero no imposible.
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