| Sumario: | «Muchos pueblos desaparecieron en España tras el gran éxodo rural acontecido a partir de los años 50. Algunos de los que sobrevivieron quedaron heridos de muerte: poblaciones peque-ñas, sin abolengo, descolocadas en la geografía y en el tiempo, inadaptadas, molestas en su concepción misma. Nada más lejos de la realidad. Fueron lugares con su historia, sus vivencias, su algo que contar y recordar; en los que todavía residen algunos vecinos, pese a todo. Luchando contra la obsolescencia programada fijada para ellos. Viviendo despreocupados ante lo que les deparará el hoy dentro de un rato. Firmes frente a los malos augurios y presagios; vivos, al fin y al cabo, y haciendo vivir a sus pueblos. Hombres y mujeres que son héroes, porque consiguieron mantener a esas poblaciones en pie cuando casi no podían ni mantenerse ellos. Este libro cuenta algunas de esas historias, poniéndoles nombres y apellidos. Porque al hacerlo, ya son para siempre. Como deberían ser los pueblos».--Contracubierta
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