Sumario: | La crisis del Ecuador es ya una de las crisis más singulares de los países del continente: por su duración; por sus caminos sin salida; por frenar las reformas propuestas por el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundialdesde hace 20 años; por no lograr los acuerdos internos para un plan de salida y de emergencia; por regresar a su tradicional inestabilidad gubernamental; por el ímpetu de la protesta sin que conlleve violencia, y su utilización para cambiar presidentes; por el uso del Estado y de los recursos públicos por partede los sectores pudientes, aun en momentos de déficit fiscal; por un país con una economía manejable, que llega a la bancarrota. Reducidos a las exigenciasinmediatas de la crisis, los ecuatorianos no logramos concebir el futuro. Predominan las emociones y visiones del momento. Por ello, el CEDIME hareunido aquí los análisis de cientistas sociales y políticos/as, para situar los diversos problemas de la crisis ecuatoriana, no sólo desde el pasado sinotambién en función del futuro y de buscar posibles salidas. Las crisis tienen un antes, un presente y un después, que deben ser entendidos para solucionarlas.
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