| Sumario: | El turismo, uno de los fenómenos más característicos en la construcción de la contemporaneidad -y hasta de la modernidad-, se ha convertido en un fenómeno esencial para nuestro tiempo. La democratización del viaje ha cambiado el modo mismo de representar la cultura. Paisajes contaminados, museos llenos, monumentos iluminados, productos y hasta personajes "típicos"..., todo se organiza para no defraudar las expectativas del que llega. Pero el turismo supone cierta estrategia para modificar nuestra noción del mundo, y es aquí donde aparecen las primeras contradicciones entre ver y mirar: nunca hemos viajado tanto y, pese a todo, seguimos siendo incapaces de entender y aceptar al otro. El libro plantea cuestiones relativas al turismo y a los viajes, partiendo de premisas relativas al ocio y las contaminaciones culturales desde el punto de vista de la historia del arte en tanto que de la mirada. Al final propone la opción de cambiar el turismo por la hospitalidad, en el sentido de Derrida, quien entiende cómo la pregunta del extranjero pone en tela de juicio el orden reinante.
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