El dúo de La Africana

El argumento se basa en una anécdota simple: las relaciones sentimentales entre los actores de una compañía, con escasos recursos económicos, que canta ópera extranjera. El empresario, que sólo habla italiano, y es muy avaro, está casado en segundo matrimonio con la tiple, una mujer joven y hermosa...

Descripción completa

Detalles Bibliográficos
Otros Autores: Fernández Caballero, Manuel, 1835-1906 (-), Echegaray, Miguel, 1848-1927
Formato: Disco de vídeo
Idioma:Castellano
Publicado: Barcelona : Planeta deAgostini 2007
Colección:Lo mejor de la Zarzuela
Materias:
Acceso en línea:Vease más información
Ver en Universidad de Navarra:https://innopac.unav.es/record=b21748561*spi
Descripción
Sumario:El argumento se basa en una anécdota simple: las relaciones sentimentales entre los actores de una compañía, con escasos recursos económicos, que canta ópera extranjera. El empresario, que sólo habla italiano, y es muy avaro, está casado en segundo matrimonio con la tiple, una mujer joven y hermosa a la que llaman “Antonelli”. El tenor “Giuseppini” de lo más escogido de la “aristocracia de Belchite” está en la compañía por su amor a la tiple. Pero la situación se complica con otra circunstancia sentimental: el bajo está enamorado de Amina, hija del empresario y su primera esposa. Amina no le corresponde porque también ama al tenor, y esto crea su rivalidad con la tiple. Durante los ensayos de la ópera LA AFRICANA hay escenas amorosas entre Giuseppini y La Antonelli; aprovechan el momento del dúo del acto IV de la ópera para mayor efusividad, lo que enfada al marido y produce efectos cómicos. Durante la representación de LA AFRICANA irrumpe en escena la madre del tenor, que quiere llevárselo a su casa; él acepta porque no puede convencer a Antonelli de que abandone a su marido. Se organiza un escándalo en el teatro, ya que ante la interrupción de la obra por la madre, el público protesta; Giuseppini quiere acabar la que será su última actuación, la Antonelli se desmaya y la autoridad pretende llevarlos a todos a la cárcel pero el empresario consigue que se termine la representación, y en ese momento finaliza la zarzuela. Parejo en regocijo a la “La Venganza de Don Mendo” de Muñoz Seca, el libreto usa de la parodia, no tanto de la ópera como de los personajes, como recurso fundamental en la construcción del texto, y se vale del italiano macarrónico de Querubini y de su hija, de frases con doble sentido, alusiones, equívocos y gesticulaciones; y así vamos viendo: el director del Coro se llama Inocente, Querubini, “aunque la gelosia le morde”, transige, hasta cierto punto, con los devaneos de su esposa con el tenor porque este canta gratis; Amina la hija de Cherubini le echa en cara que el tenor no canta por amor al arte sino por amor a la mamma ; hasta a la misma Antonelli, menos parodiada, se le oye decir que es una tiple “pero ligera” lo que provoca la sentencia del coro “¡Ay! Eso pronto lo ve cualquiera”; y que decir del tenor que desgranando sus papeles en Marta, Norma o La Travista se encuentra asimismo con el veredicto del Coro que le tacha de mujeriego, y más adelante se defiende como gato panza arriba del deseo de Querubini de ser su suegro. Se salvan de lo burlesco la canción andaluza de la tiple y, sobre todo, el famoso dúo-jota. Esta trama es servida por una música siempre teatral y chispeante y algunas veces sublime con intervenciones continuas del coro y en que sobresale el de la introducción jalonado por la mazurca y el vals, la canción andaluza de la soprano, el insinuante coro de la murmuración, el pícaro dúo de Querubini y Giuseppini y sobre todo el apoteósico, enervante y brillantísimo dúo-jota final.
Descripción Física:1 DVD (ca. 68 min.) : son., col. ; 12 cm