| Sumario: | Además de la intervención de la gracia en la vida de la fe, se estudia también en este libro el libre albedrío o libertad humana, que podría decirse que es su sujeto, así como la fe es su inicio. Para todo ello, se ha seguido a Santo Tomás, que como un faro, siempre, aún en las tinieblas de mares agitados y tenebrosos, no sólo da luz y calor, sino que también ayudan a llegar al puerto definitivo de la verdad y del bien.
En la primera parte, 'La sabiduría de la fe', se tratan las cuestiones de la fe en sus relaciones con los saberes naturales y sobrenaturales. Tal como enseñaron San Agustín y Santo Tomás, la fe y la razón se armonizan perfectamente, pero también con el amor o caridad.
En la segunda parte, 'El don de la gracia', se expone detenidamente la doctrina de la gracia de Santo Tomás, que asume las de San Agustín y San Bernardo
Se tienen muy en cuenta también las famosas controversias teológicas y filosóficas llamadas de "auxiliis", de finales del siglo XVI, en cuyo centro estaba el problema de la libertad. Se estudia asimismo el enfrentamiento de la escuela tomista o bañeciana a la molinista, que había revisado la doctrina expuesta por el concilio de Trento, para superar la crítica luterana a la libertad. Igualmente se presentan las soluciones posteriores sobre la concordia entre la gracia y la libertad, como las del jansenismo y las de los denominados sistemas medios, todas ellas conexionadas con el enfrentamiento de la doctrina agustiniana al pelagianismo y al semipelagianismo.
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